La declinación del caso Odebrecht hacia la jurisdicción ordinaria en lo que respecta a la mayoría de los imputados, provocó la reacción del Ministerio Público, que rechazó de inmediato este martes que el Pleno de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), en función de jurisdicción privilegiada, se declarara incompetente para conocer el juicio de fondo del caso que involucra a la multinacional.
El Pleno dispuso que el proceso penal seguido a el empresario Ángel Rondón, el abogado Conrado Pittaluga, los exfuncionarios Víctor Díaz Rúa, Roberto Rodríguez y Andrés Bautista sea remitido a la Presidencia de la Cámara Penal del Juzgado de Primera Instancia del Distrito Nacional para que éste su vez designe un Tribunal Colegiado para que conozca el caso.
El proceso de estos imputados era conocido por la SCJ por el arrastre que creaba el senador Tommy Galán, quien si ostenta el cargo que indica la norma para ser juzgado en esta alta corte.
El Pleno de la SCJ indicó que abandonaba la aplicación del arrastre y que para ello consideró los principios de razonabilidad y utilidad, además del reconocimiento del derecho de todo ciudadano a ser juzgado por su juez natural y el derecho al doble grado de jurisdicción.
Mientras que el proceso judicial seguido al actual senador Tommy Galán será conocido por la Segunda Sala (o Sala Penal) de la SCJ, y en caso de que haya un recurso de casación entonces lo conocerá el Pleno, con lo que explicó se garantiza el derecho a recurrir la decisión a intervenir en única instancia.
En ese sentido, el Ministerio Público afirmó que este fallo “muestra lo difícil que es perseguir el tema de corrupción en República Dominicana”.
“En mi posición muy particular esta es una decisión frustrante que el más alto tribunal del país abandone un criterio que había mantenido históricamente y de forma pacífica, sino que lo hace sin argumentos suficientes para abandonar el criterio del arrastre”, expresó el procurador fiscal Wilson Camacho.
Aseguró que el Pleno de la SCJ hoy dejó de administrar justicia, que “es su obligación y dedicarse a administrar en forma matemática un proceso penal”.
“Que Dios ampare la República Dominicana”, concluyó.
De su lado, los abogados de los imputados celebraron el fallo emitido por el Pleno de la SCJ y declararon este día como histórico “al romper con una tradición maldita”.
El abogado de Ángel Rodón aseguró que la “sociedad debe de estar de regocijo en el día de hoy al inversa de lo que dice el Ministerio Público”.
El jotitas José Miguel Minier afirmó que el Pleno de la SCJ garantizó lo establecido en la Constitución.
Asimismo, Miguel Valerio, abogado de Víctor Díaz Rúa, dijo que cuando el juez Francisco Ortega, quien conoció la audiencia preliminar quitó la asociación de malhechores, “no había ningún motivo para que estos señores permanecieran en la Suprema Corte de Justicia”.
“Hoy la Suprema Corte de Justicia rompió con una tradición maldita y eso es lo que nos alegra”.