Los líderes políticos dominicanos pasan la conmemoración de la Semana Santa de diversas maneras, ya sea por la creencia religiosa o las responsabilidades propia del oficio, pero tienen elementos en común: tratan de vivir la festividad entre la familia, el campo o aprovechar para viajar al exterior a conferencias o descanso.
El presidente de la República, Danilo Medina, sigue la línea de los anteriores mandatarios, de dirigir un mensaje al país con motivo de la Semana Santa, exhortando a preservar la vida y evitar accidentes de tránsito, y luego, no se le ve en actividades religiosa ni de diversión.
El expresidente de la República y presidente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Leonel Fernández, estuvo fuera del país, en eventos políticos por Argentina, Ecuador y Estados Unidos, a propósito de que fue el jefe de los observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA) para las elecciones en Ecuador.
El excandidato presidencial del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Luis Abinader, viaje a Miami, Estados Unidos, invitado a la cumbre latina.
Del expresidente y agrónomo Hipólito Mejía, amante al campo, no se pudo conocer el alcance de sus actividades durante estos días de ceremonias y tradiciones católicas.
El excandidato presidencial por Alianza País. El jurista Guillermo Moreno, declaró a este diario, que utiliza el tiempo de Semana Santa para reflexionar. Le gusta ir al campo y a la montaña.
Narró los días de su niñez y el estilo de vida del Viernes Santo en su casa materna, cuando su padre ni siquiera aceptaba escribir en la maquinilla de teclado, para no hacer bulla.
“La Semana Santa representa el momento en que ese personaje, llamado Jesucristo, asume los mayores sacrificios por la salvación de la humanidad”.
“En la adolescencia, el Viernes Santo no podía hablar en tono alto al levantarse. Se bañaban sin hablar con nadie, como forma de purificarse”.
Estaban prohibidos los juegos que producían bullas, como los de mesa. Su familia asistía a los cultos religiosos y dedicaba el día a la reflexión. No comían carne el Vienes Santo y durante los días marcados en la cuaresma.
Su familia dedicaba un día a la reflexión sosegada, en duelo y recordación de la muerte de Jesucristo.
Afirma que la invitación es a la reflexión y la introspección. “Por eso, yo siempre la paso en familia y los dos lugares que prefiero es el campo y la montaña”.
Asume que esos ambientes lo invitan a reflexionar, por ser un momento para sincerarse consigo mismo, pasar revista a los defectos y a las virtudes, y luego, tratar de corregir los defectos y fortalecer las virtudes.
Moreno, exfiscal del Distrito Nacional, señala que la Semana Santa es para asumir compromisos con la familia, seres más cercamos, y pensar en el país, puesto que en la vida en sociedad, todo está entrelazado.
Males vistos por Moreno. En este tiempo de Semana Santa, el dirigente político y escritor piensa en el país y en los graves problemas, como la inseguridad pública, la injusta distribución de la riqueza, la falta de oportunidades, sobre todo, para los jóvenes.
Examina los “nubarrones en el horizonte”, como califica el tema del endeudamiento del país, la corrupción administrativa y la impunidad. “Este es el momento de preguntarnos qué no estamos haciendo como ciudadano, qué no estamos cumpliendo con nuestros deberes ciudadanos y qué podemos hacer para dejar mejor país a nuestros hijos y a los hijos de nuestro país”.
Plantea los tres niveles de reflexión: personal, familia y social, necesarios para el cambio.