NUEVA YORK (AP) – Funcionarios de la Agencia de Seguridad en el Transporte (TSA) en el aeropuerto internacional Logan de Boston denunciaron que un programa diseñado para ayudar a detectar posibles terroristas con base en determinadas peculiaridades ha generado encasillamiento racial, de acuerdo con un reporte del diario The New York Times.
Sobre la base de entrevistas y denuncias internas que ha obtenido, el New York Times (http://nyti.ms/P2enzf ) reportó que más de 30 oficiales de la agencia involucrados en el programa de «detección de conducta» en Logan dicen que la operación no sólo se enfoca en individuos originarios de Medio Oriente, sino también en pasajeros que cubren ciertos perfiles, como hispanos que viajan a Miami o negros que usan gorras de béisbol con la visera hacia atrás.
El programa tiene como fin permitir a los oficiales detener, catear e interrogar a pasajeros que presenten comportamientos considerados sospechosos.
La agencia federal indicó al periódico que actualmente investiga las acusaciones y afirmó que si las acusaciones con ciertas, tomará «medidas inmediatas y decisivas». En una reunión el mes pasado con la ahgencia, agentes proveyeron quejas escritas, algunas de ellas anónimas, de 32 funcionarios.
Los agentes dijeron que sus colegas estaban cada vez más centrándose en minorías, considerando que esas acciones llevarían al descubrimiento de drogas, personas con órdenes de arresto en su contra y problemas de inmigración, en respuesta a presiones de jefes que deseaban números más altos de detenciones, cateos y casos criminales, dijo el Times.
«El programa de detección de conducta ha dejado de ser un programa basado en conducta, y se ha convertido en un programa de perfilamiento racial», escribió un agente en una nota anónima obtenida por el periódico.
El programa, que ha sido calificado de modelo para otros aeropuertos en el país, tiene el objetivo de permitir a los agentes parar, catear e interrogar a pasajeros que parezcan sospechosos. Asesores especialmente entrenados observan líneas de seguridad para detectar actividad inusual y hablar individualmente con pasajeros, buscando contradicciones en las respuestas a preguntas y conducta como evitar contacto visual, nerviosismo o sudor.
Pasajeros considerados sospechosos pueden ser apartados para interrogatorios más exhaustivos.
Al menos un pasajero ha presentado una queja formal ante la TSA. Kenneth Boatner, un sicólogo y asesor educacional de raza negra que viajaba a Atlanta por razones de trabajo e mes pasado, dice que fue detenido por casi media hora mientras agentes examinaban sus pertenencias, incluyendo su chequera y notas clínicas sobre sus pacientes.
En una entrevista con el Times, Boatner dijo que se sintió humillado y que los agentes no le explicaron por qué le escogieron, aunque él sospecha que fue por su raza y su indumentaria. Boatner lucía pantalones deportivos, una camiseta blanca y zapatillas de baloncesto.
La TSA dijo que el programa en Logan «de ninguna manera alienta ni tolera el perfilamiento racial» y que los pasajeros no pueden ser sujetos a evaluaciones de conducta basados en nacionalidad, raza, etnia ni religión.