Conecta con nosotros

Editorial

Una Fecha Para Recordar

Published

on

revolucion-24-de-abril-1965-300x189Hoy se cumple el cuarenta y ocho aniversario de la Revolución de Abril del año 1965, en la que quedó sembrada para siempre la valentía y la dignidad del pueblo dominicano frente a fuerzas invasoras que causaron daños indelebles a la sociedad.

Cientos de dominicanos se inmolaron en defensa de la soberanía, la independencia y el derecho a la autodeterminación de la patria de Duarte, Luperón y Francisco Alberto Caamaño Deñó, quienes resistieron con decoro y gallardía  las amenazas a las tierras que les vio nacer.

La intervención armada de los Estados Unidos era la segunda que se producía desde el imperio del norte en toda nuestra vida republicana, la primera de las cuales tuvo lugar en el año 1916, tras un proceso de endeudamiento que inició un malo dominicano llamada Buenaventura Báez y que le dio continuación Ulises Heroux (mejor conocido como Lilís).

Ambas intervenciones tuvieron de común que fueron provocadas por las mismas familias, aquellas  que todavía están presentes en la vida pública nacional y cuya última estocada fue la quiebra de los bancos Intercontinental, Bancrédito y del Comercio.

Esos tres bancos cometieron una estafa en contra del Estado y de toda la sociedad dominicana que superó los doscientos mil millones de pesos, lo que creó el déficit cuasi-fiscal en el Banco Central y aumentó la deuda pública interna y externa y la deuda per capita del país.

Las familias Báez y Cabral, descendientes de Buenavenura Báez y  del octavo-avo presidente dominicano, Marcos Cabral Figuereo, son, sin lugar a dudas, los responsables de la primera y la segunda intervención armada y de prácticamente todas las tragedias económicas y financieras que ha sufrido la patria.

De manera, que aquellos que se enfrentaron en el año 1965 esa intervención armada, encabezados por Francisco Alberto Caamaño Deñó y otros  pro hombres, lo hicieron en contra de una oligarquía que es la responsable de la gran tragedia que hoy vive el país de pobreza y de miseria extrema.

Un día como hoy las presentes generaciones deben conocer quiénes son los responsables del gran deterioro de la sociedad dominicana, cuyo principal marco de referencia son los protagonistas de la vida política, económica y financiera nacional, que constituyen, sin lugar a dudas, verdaderos depredadores del patrimonio público.

Los jóvenes de hoy deben escudriñar lo suficiente para que hagan conciencia de los responsables de su gran tragedia que se caracteriza por la falta de empleos, corrupción generalizada, exclusión social, violencia, delincuencia, tráfico y consumo de drogas y otros males que hoy se tragan a la República Dominicana.

Hoy los dominicanos y dominicanas deben rendir tributo a hombres y mujeres que lo dieron todo a cambio de nada, porque amaban su patria y querían lo mejor para las futuras generaciones.

Loor a Francisco Alberto Caamaño Deñó, Manuel Aurelio Tavarez Justo, Gregorio Luperón y otros tantos héroes dominicanos que no deben olvidarse jamás de la conciencia nacional por su legado, por su amor a la patria y por darlo todo en la búsqueda de la felicidad del pueblo.

Click to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Editorial

La degradación de la política en los Estados Unidos.

Published

on

Desde hace mucho tiempo que se escucha decir que los Estados Unidos han iniciado en el campo político un tránsito indetenible hacia el tercer mundo.

Ese convencimiento en muchos lugares del mundo no luce que sea solamente por la carestía del costo de vida y la predominación de empleos de mala calidad, sino, principalmente, por el aparecimiento de una figura que no respeta nada ni a nadie.

Donald Trump ha demostrado la fragilidad del sistema norteamericano con violaciones de la ley civil y penal que lo iguala a lo que ocurre allí con los llamados países del tercer mundo.

Donald Trump ha dejado claro que tiene más poder y fuerza que los instrumentos que tiene el Estado para combatir el crimen y el delito.

Sin embargo, se observa que este personaje parece haber entrado en decadencia con la entrada en escena como candidato presidencial de Kamala Harris.

Aunque, naturalmente, nadie todavía puede cantar victoria, porque Trump se mueve entre altas y bajas, pese a que políticamente se ha beneficiado más de la primera que de la segunda.

Ello así, aunque su discurso es discriminatorio, promotor de violencia y de una serie de irreverencia, pero la mas o  mayor perjudicada es la sociedad norteamericana.

Su agresividad ha sido tan radical que aparte de atacar instituciones sagradas de la vida de los Estados Unidos, ha intentado acabar o eliminar organismos de seguridad como el Buró Federal de Investigaciones (FBI), al cual ha atacado sin piedad.

Ahora se podría decir que la principal amenaza a la permanencia de Trump en la vida pública de los Estados Unidos de América sea su edad, porque de otra manera no habría forma de apartarlo de la política de esa nación.

Las elecciones de noviembre podrían ser el último eslabón de un Donald Trump que no para de ofender y de alguna manera burlarse de la sociedad que dice defender.

Continue Reading

Editorial

Antivalores impuestos por el Estado arropan sociedad dominicana.

Published

on

 Los perfiles de la sociedad dominicana indican desde hace muchos años que somos una nación profundamente patológica.

El estudio que sirve de base para esta afirmación y que se publica en la sección De Portada de este periódico, deja claro que la República Dominicana presenta un cuadro que requiere de un tratamiento especial.

Lo malo de esto que lo que se refleja en la investigación en referencia confirma la tesis de que el dominicano ha sido arropado por una serie de antivalores, cuyo principal promotor es el Estado.

La cuestión es que nadie confía en nadie, todo el mundo duda de los demás, es un asunto que impacta de una forma muy severa el desarrollo social, lo cual también daña lo económico.

Pero lo preocupante no es sólo conocer y analizar esa realidad, sino pensar en cómo darle solución a un problema que ha minado los cimientes ético-morales de los dominicanos.

Lo más lamentable de esta realidad es que nadie toma el asunto en serio y cuando alguien expresa su preocupación sobre lo que ocurre es considerado como un desfasado y desadaptado social.

De manera, que se trata de un problema de fondo que no se soluciona con acciones simples y sin consistencia.

La pregunta es cómo enfrentar esa cultura de “dejar hacer y dejar pasar”, cuya sociedad sobrepone lo económico por encima de cualquier valor familiar, moral o social.

Esta encuesta retrata de cuerpo entero una sociedad profundamente enferma y con tendencia a empeorar hasta poner en peligro su propia existencia.

De cada uno de los dominicanos depende que esa realidad cambie, pero para ser realista mientras el Estado no se maneje con un criterio diferente, es decir, promover valores, más que anti valores, muy difícilmente el cuadro se pueda revertir.

 Tenga toda la seguridad de que así es, hermano conciudadano.

Continue Reading

Editorial

Las fortunas, aunque mal habidas, es una garantía de vigencia en el escenario político nacional.

Published

on

Cada día se confirma que el discurso de los políticos es sólo un instrumento para mentir y vender una percepción que no tiene nada que ver con la realidad.

Esa forma de ver la vida parece que será la principal causa para que la República Dominicana colapse totalmente.

Tanto es así que el presidente Luis Abinader y el PRM se han encargado de dejar claro que la falta de transparencia y de ética sólo tienen sentido si el personaje involucrada no está con su causa.

Esta conducta de Abinader y el PRM se confirma con la designación de Julio Cesar Valentín en la Superintendencia de Seguros, ya que cuando fue imputado de corrupción en el caso Odebrecht fue causa de satisfacción por parte de los oficialistas, pero hoy celebran y bailan juntos.

Pero esta realidad no se da porque se trata de Valentín, sino de cualquier otro peledeísta imputado de corrupción que se pase al gobierno, porque al ser todos iguales su maldad está determinada por el litoral en que se encuentre el personaje involucrado.

De manera, que unos y otros son pájaros del mismo nido, aunque se proyecten con nombres y colores diferentes.

La gran desgracia de la República Dominicana tiene que ver con la cultura depredadora de su gente, lo cual probablemente es peor que la falta de institucionalidad, de la pobre fiscalización y de los bajos niveles de regulación que impactan al Estado.

Es una carrera en contra del tiempo que parece ser silenciosa, pero que en realidad no lo es, porque el comportamiento de la clase política deja claro que su nivel de interpretación y planteamiento de soluciones no llega más allá de su prioridad que es enriquecerse al precio que sea.

Por eso la preocupación de los que conforman los partidos de turnarse en la repartición del patrimonio nacional, no otra cosa, no deja margen para creer que haya mecanismos eficientes para combatir ese mal.

Es un problema de grandes magnitudes, porque no hay quien pueda dar el primer paso para combatir el principal instrumento de la corrupción y el atraso como son los partidos políticos, los cuales con su irracionalidad y falta de delicadeza, no dejan ninguna vía y mucho menos se ve alguna vocación para erradicar ese mal comportamiento.

Continue Reading

Edificio La República: Restauración No. 138, cuarta planta, Santiago, República Dominicana. Teléfono: 809-247-3606. Fax: 809-581-0030.
www.larepublicaonline.com  / Email: [email protected]
Copyright © 2021 Blue National Group