Opinión
¿Podría perder el PLD en el 2016?
Published
9 años agoon
Por Rosario Espinal
Es difícil derrotar un partido enquistado en el poder, con excesivos recursos económicos e institucionales, un vasto sistema clientelar y asistencialista, y una oposición débil. ¡Obvio! Por eso el PLD se proyecta ganador de las próximas elecciones a pesar de las insatisfacciones de un amplio segmento del electorado, de los conflictos internos en el PLD, y de los escándalos de corrupción.
Vale, de todas formas, evaluar las posibles situaciones en que podría perder el PLD.
Una, si se presentara una crisis económica de magnitud que genere no sólo insatisfacción, sino también desesperación en la población.
A menos de siete meses de las elecciones de 2016, esta posibilidad es minúscula. El petróleo registra bajo precio, las tasas de interés siguen bajas, y la economía de Estados Unidos (principal socio comercial de República Dominicana) no está en recesión. Lo que sí podría reducir sustancialmente la actividad económica dominicana es la veda de productos de exportación a Haití (segundo socio comercial); pero el efecto negativo, de persistir esta situación, podría ser temporalmente matizado con dispositivos nacionalistas del Gobierno.
Dos, si surgiera un fuerte movimiento social de protesta que sirva de base para la emergencia de un liderazgo carismático sustentado en ese movimiento.
Esa posibilidad es casi nula. En República Dominicana no se registran grandes movimientos sociales desde la década de 1980, y una parte importante de las fuerzas contestatarias con capacidad de torpedear el Gobierno (los choferes, por ejemplo) son parte integral del sistema clientelar que dispensa el Estado.
Tres, el surgimiento de un partido político fuerte (o coalición) que entusiasme el electorado y genere confianza.
En este momento no existe tal organización ni coalición. El PRM trata de ocupar este espacio al heredar un segmento del electorado perredeísta, pero para lograrlo, tiene que solidificar su estructura organizativa a nivel nacional y forjar un liderazgo convincente que motive un amplio segmento del electorado. Los otros partidos de oposición son, electoralmente hablando, pequeños. Además, están fragmentados.
Cuatro, que las diferencias internas en el PLD se agudicen y lleven a su debilitamiento y fractura.
Es muy difícil que eso ocurra mientras Danilo Medina registre alta aprobación, porque ese es actualmente el elemento aglutinador del peledeísmo. Además, el comité político siempre ha dado muestras de decantarse por quien augure mayor triunfo.
Cinco, si surgiera repentinamente un liderazgo carismático que engrampe con el descontento de la sociedad, aún carente de movimiento social o partido fuerte que sirva de soporte. Generalmente eso ocurre cuando hay un colapso total de los partidos, que no es el caso dominicano porque el PLD sigue estructurado.
Como se deriva de estos planteamientos, es difícil derrotar el PLD en el 2016, pero la oposición parece no admitir la magnitud del problema y prefiere ser ilusa. Los principales aspirantes presidenciales de oposición asumen que sus candidaturas, en alianzas minúsculas, llevarán al triunfo.
Dada la historia política dominicana de grandes formaciones partidarias, de no presentarse una crisis económica de magnitud que arrastre con el Gobierno, el país necesita una organización política sólida (un partido o una gran coalición), para competir electoralmente con el PLD.
Si no, las elecciones de 2016 serán como una serie de béisbol entre un equipo de grandes ligas y varios de ligas menores.
El supuesto de que la insatisfacción de la población llevará indefectiblemente a votar por la oposición es infundado. Sin opciones convincentes, la mayoría del electorado votará por la reelección o se abstendrá.
Si la oposición se resiste a entender esta lógica electoral, cosechará malos frutos el próximo mayo y contribuirá a una nueva victoria avasalladora del PLD.
Artículo publicado en el periódico HOY
Por Isaías Ramos
«Este gobierno se ha caracterizado por presentar como ‘éxitos’ lo que en realidad son fracasos. El presidente, en su rendición de cuentas, nos pinta el país como una Suiza en América. Para vender sus ilusiones y crear falsas percepciones, se gastan recursos y tiempos valiosos que podrían dedicarse a lo que es verdaderamente importante.
A veces, pienso que esto es simplemente la excusa perfecta para encubrir su fracaso en cumplir las promesas que cada cuatro años venden al pueblo en las elecciones: que se haría justicia contra los corruptos y que los recursos robados serían recuperados. Sin embargo, no ha sucedido ni una cosa ni la otra.
Una partidocracia caracterizada como corrupta jamás combatirá la corrupción y, mucho menos, propiciará una justicia independiente.
En esta partidocracia, nunca han sido capaces de venderle un proyecto de nación al pueblo que nos lleve por un camino de desarrollo y progreso, con ideas claras sobre el país que queremos construir. Mucho menos la patria que aspiramos dejarle a nuestros hijos, ni los hijos que queremos dejar a nuestra patria.
El sistema utiliza diferentes métodos de manipulación y engaño, mientras nos lleva de manera silente y constante a la pobreza, inestabilidad y miseria. Vemos cómo han ideado diversas formas de timar al pueblo, donde el Estado cede, transfiere o hipoteca de manera desordenada los bienes o patrimonios públicos al sector ‘privado’ o ‘financiero’. A estos últimos se les garantizan ganancias y lucros exorbitantes y sin riesgo, mientras se imponen cargas tributarias enormes a las clases media y trabajadora del país, junto con endeudamiento a las futuras generaciones, para así poder garantizar las ‘ganancias’ a los ‘inversionistas’.
Fruto de esa desacertada política pública, de cada 100 pesos que ingresan al Estado, 25 pesos son para pagar solo intereses de la deuda acumulada; igual sucede con los famosos fideicomisos, siendo el mejor ejemplo Vial RD, donde de cada 100 pesos que ingresan, 50 son para el pago de intereses al sector financiero. Mientras tanto, la deuda social acumulada se convierte en una bomba de tiempo a punto de estallar.
Pareciera que ya no solo estamos ante una doctrina del ‘dejar hacer’. Estamos ante un sistema que se impone de manera sutil, pero que lleva una agenda oculta. Dicha agenda acelera el proceso de transformación del sistema hacia un tipo de neo-feudalismo, en el que la distancia entre los que ‘tienen’ y los que ‘no tienen’ no hace más que aumentar cada día.
Es tanto el abuso de poder y la opresión a los que este sistema ha sometido al pueblo, que el mismo sistema podría colapsar. El sistema está sustentado sobre bases muy débiles, como son la especulación del capital, el lavado de dinero, la opresión y los privilegios de unos pocos, ignorando el mérito, la producción, la productividad, los principios y los valores.
El pueblo está cansado de ser gobernado por una clase política que solo se preocupa por garantizar el estatus quo y los beneficios de una élite político-económica que es egoísta, insaciable y avariciosa.
En el Frente Cívico y Social estamos convencidos de que ha llegado el tiempo de trabajar para la liberación, la inclusión y la cooperación. Es el tiempo de que gobiernen los que piensan y actúan en favor de las mayorías, de una manera organizada y productiva, con igualdad de derechos y oportunidades, en una economía liberada al servicio de la vida y del pueblo.
Desde el Frente Cívico y Social, hacemos un llamado a todos los dominicanos conscientes y comprometidos con el futuro de nuestra nación a estar vigilantes y participativos en el debate que se avecina en el Congreso sobre las regulaciones que se impondrán a las candidaturas independientes. Es crucial que cada uno de nosotros comprenda y se involucre en este proceso para asegurar que las regulaciones apoyen y no limiten la viabilidad de las candidaturas independientes.
Tan pronto como se establezcan las regulaciones para las candidaturas independientes, lanzaremos plataformas para ofrecer apoyo logístico y asesoría. Esta plataforma no solo facilitará logística y orientación, sino que también promoverá activamente los principios de un Estado Social y Democrático de Derecho, donde la justicia, la igualdad y la libertad no sean solo ideales, sino realidades palpables.
Pronto les estaremos invitando a unirse a esta plataforma, a participar en nuestros talleres y reuniones, y a utilizar nuestras herramientas de educación cívica. Juntos, podemos hacer historia y transformar nuestro sistema político en uno que verdaderamente represente los intereses y las aspiraciones de todos los dominicanos.
¡Levantemos nuestras voces, tomemos acción y hagamos que nuestra Constitución sea una realidad viva en cada rincón de nuestra querida República Dominicana!
¡Despierta RD!»
Opinión
Las candidaturas independientes, No es ni será suficiente para cambiar el Sistema.
Published
6 días agoon
marzo 5, 2025Por: Edgard Paniagua Miguel
El logro del reconocimiento y aceptación de las Candidaturas Independientes plasmado en la Constitución de la República no será suficiente para ponerlas en condiciones iguales a las Candidaturas de los Partidos Políticos.
Hay que seguir legislando y cambiando y modificando leyes y aspectos administrativos que envuelven todo el Sistema.
Hay un paso, tanto o más necesario, como el logrado con las Candidaturas Independientes, y es el del manejo de los recursos y la publicidad que provee la JCE.
Entiendo que el Estado no debe proveer dinero a los Partidos en aras de sostener el sistema democrático del País. Para mi, nada tiene que ver una cosa con la otra; y segundo, es harto conocido el mal uso que se le dan a esos fondos. Desde quedarse en manos de dos o tres líderes, hasta la compra de votos y cédulas. Aberraciones del sistema.
Las Candidaturas Independientes estarían en desventaja permanente si eso siguiera el mismo esquema.
Mi propuesta es que:
1. La JCE maneje esos fondos
2. La JCE use esos fondos para desarrollar las campañas electorales de forma igualitaria para todas las candidaturas
3. La JCE pondría publicidad en todos los medios y sus vertientes en donde aparecerían todos los candidatos y sus fotos igualitariamente para que el elector los vea a todos en las mismas condiciones.
4. Se persiga y condene la compra de votos, y hasta las anulaciones de candidaturas que en el acto mismo se sorprendan comprando votos o cédulas.
De esa manera,
1. El Estado se ahorraría millones de pesos.
2. Todos las candidaturas estarían en el mismo plano. Y los recursos no perjudicarían a unos o beneficiarían a otros.
3. El pueblo tendría la oportunidad de elegir a candidatos independientes y no a los impuestos (a veces corruptos) propuestos e impuestos por los Partidos.
4. Tendríamos un modelo más democrático e igualitario que el actual.
Y si han dado el grito al cielo por la aprobación de as CI, no me imagino lo que harán para impedir la propuesta antes descrita.
Las Candidaturas Independientes ha sido un gran logro; pero no será suficiente si no seguimos modificando el Sistema corrupto que nos han impuesto.
Opinión
Examen de reducción de la pena ante la Corte Penal Internacional
Published
6 días agoon
marzo 5, 2025Por Rommel Santos Díaz
De conformidad con el Estatuto de Roma el Estado de ejecución de la pena no pondrá en libertad al recluso antes de que haya cumplido la pena impuesta por la Corte Penal Internacional.
Solo la Corte Penal Internacional podrá decidir la reducción de la pena y se pronunciará al respecto después de escuchar al recluso.
Cuando el recluso haya cumplido las dos terceras partes de la pena o 25 años de prisión en caso de cadena perpetua, la Corte Penal Internacional examinará la pena para determinar si esta puede reducirse. El examen no se llevará a cabo antes de cumplidos esos plazos.
Al proceder al examen con arreglo al párrafo 3 del artículo 110 del Estatuto de Roma , la Corte Penal Internacional podrá reducir la pena si considera que concurren uno o más de los siguientes factores:
- a)Si el recluso ha manifestado desde el principio y de manera continua su voluntad de cooperar con la Corte Penal Internacional en sus investigaciones y enjuiciamientos;
- b)Si el recluso ha facilitado de manera espontánea la ejecución de las decisiones y órdenes de la Corte Penal Internacional en otros casos, en particular ayudando a esta en la localización de los bienes sobre los cuales recaigan las multas, las órdenes de decomiso o de reparación que puedan usarse en beneficio de las víctimas; o
- c)Otros factores indicados en las Reglas de Procedimiento y Prueba que permitan determinar un cambio en las circunstancias suficientemente claro e importante como para justificar la reducción de la pena.
Finalmente, la Corte Penal Internacional, si en su examen inicial con arreglo al párrafo 3 del artículo 110 del Estatuto de Roma, determina que no procede reducir la pena, volverá a examinar la cuestión con la periodicidad y con arreglo a los criterios indicados en las Reglas de Procedimientos y Prueba.