Consejo universitario autoriza que la Policía entre al campus a investigar y esclarecer la muerte de un coronel
Las manifestaciones violentas obligaron a cerrar los negocios en San Francisco de Macorís.
Investigadores policiales examinan la escena donde cayó abatido el coronel.
La UASD autoriza a la PN y al Ministerio Público requisar el campus; disturbios paralizan pueblos del Cibao.
Las protestas registradas en las últimas horas, con la utilización de armas de alto calibre, en el campus de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) y varios pueblos del Cibao, dejaron ayer un saldo de dos muertos y diez heridos, incluyendo un coronel de la Policía Nacional abatido de un tiro en la cabeza. El coronel Julián Suárez Cordero recibió un impacto de bala mientras dispersaba a los estudiantes que protestaban en el campus de la UASD.
En tanto que en San Francisco de Macorís resultó muerto Félix Hernández Valentín, de 24 años, residente en el sector Vista al Valle. Según la versión policial, el fallecido, junto a otros encapuchados, enfrentó a los agentes, en los alrededores de la cancha de la Máximo Gómez, en el inicio de la protesta por 48 horas convocada por el Frente Amplio de Lucha Popular (Falpo) en demanda de obras y otras reivindicaciones.
La Policía Nacional se declaró en luto por la muerte del coronel. El jefe de la institución, mayor general José Armando Polanco Gómez, acusó a algunas autoridades y políticos de permitir que estudiantes penetren a la UASD con armas de alto calibre. “Cinco o seis delincuentes en el interior de la UASD, con complicidad con algunas autoridades y algunos funcionarios, y hay políticos también que son cómplices de esto, permiten que delincuentes terroristas armados con fusiles entren al campus de la UASD”, sostuvo Polanco Gómez.
“Los que cometieron ese hecho los vamos a buscar, no importa a quien tengan de sombrilla. Les vamos a dar una respuesta que va a ser tal para cual”, advirtió Polanco Gómez.
Justo en los momentos en que el jefe de la Policía hacía estos pronunciamientos, a los hijos de Suárez Cordero se les veía turbados. Caminaban de un lado a otro en el patio del Centro Médico UCE. Juan Ramón Suárez, de 20 años, hijo menor del malogrado coronel, solo pide que la Policía atrape y someta a la Justicia a las personas que mataron a su papá.
Por su lado, el procurador General de la República, Francisco Domínguez Brito, calificó como un acto criminal la muerte del oficial. A propósito, el Consejo Universitario autorizó a las autoridades policiales, acompañados de la prensa y el Ministerio Público, revisar el campus de la institución para la investigación en torno a los sucesos.
En los disturbios de la UASD también resultó herido el coronel Julio Justino Rodríguez, subdirector de Operaciones Policiales, quien recibió un impacto de bala en una pierna, el raso Rafael Batista Pérez, herido en una mano, y Juan de Jesús Pérez, quien pasaba por los predios de la UASD y fue alcanzado por un disparo en un costado.
El fuero
La ministra de Educación Superior, Ligia Amada Melo, favoreció la eliminación del fuero universitario para incrementar la vigilancia dentro de la UASD, para evitar que extraños entren y alteren el orden. “Yo creo que ya se necesita que eso se quite y que haya una vigilancia permanente dentro de la institución, que evite que entren los que van a alterar el orden, porque esas cosas ocurren no con los estudiantes que están ahí adentro, sino con los infiltrados”, manifestó.
Heridos en el Cibao
En el Cibao, el primer día del paro por 48 horas dejó un saldo de un manifestante muerto, siete heridos de balas y perdigones. Hechos violentos se registraron en San Francisco de Macorís, Bonao, Salcedo, Esperanza, Mao y otras comunidades. El comercio cerró sus puertas debido a la explosión de artefactos casero.
El segundo teniente Luis Manuel López Luciano, comandante del destacamento policial del distrito municipal de Jicomé, tuvo que ser internado en un centro de salud privado de Mao, debido a herida de arma de fuego en el tobillo derecho. l
Grupos exigen mejoría de servicios básicos
Las comunidades en paro demandan nacionalizar la minera Barrick Gold, rechazo a las pretensiones de explotar a Loma de Miranda entre La Vega y Bonao. También piden mejoría del servicio eléctrico, agua potable y arreglo de vías. Además reclaman la entrega de 140 millones que supuestamente fueron desviados en la construcción de los edificios de la universidad CURCE-UASD de Monseñor Nouel.
El Caribe