Conecta con nosotros

Editorial

No es una Exageración, es la verdad

Published

on

República-DominicanaLiteralmente hablando, hemos perdido el país.

Esta afirmación se desprende de un fenómeno que revela hasta dónde el dominicano, aunque para ser diplomático no debemos generalizar, ha perdido su don  de gente.

Los perfiles que presenta la sociedad dominicana permite colegir que el país sufre un nivel de degradación moral y ética que la convierte en una de las peores en este aspecto de toda Latinoamérica.

Son innumerables los casos en que personas que sufren un accidente automovilístico en cualquiera de las carreteras, calles y avenidas de la República Dominicana llaman a la atención de algunos de sus conciudadanos, no precisamente para ofrecerles los primeros auxilios, sino para robarles hasta los zapatos que calzan.

El último de estos hechos ocurrió con la ex-reina de belleza Kerbelin Castillo, quien luego de sufrir un accidente automovilístico las personas que acudieron en su auxilio primero le robaron su celular y su laptop y luego simularon darle asistencia.

Este alto nivel de degradación que padece la sociedad dominicana obedece a que allí hoy predomina una verdadera cultura del robo, cuya razón de ser tiene que ver mucho con la miseria y con los anti-valores que imponen los políticos que luego se convierten en funcionarios públicos.

La República Dominicana es hoy, sin lugar a dudas, una jungla, donde predomina la expresión muy popular de «sálvese quien pueda».

Lo que no se entiende por qué la parte más sana de la sociedad no sale a confrontar una realidad que cada día, cada hora, cada minuto y cada segundo nos dice que hemos perdido a la República Dominicana.

Es muy poco lo que queda del sentido humano  de la vida en la República Dominicana.

Hace algunas décadas que ver un cadáver o una persona mal herida generaba una pena, un dolor en el alma y una alta solidaridad con los familiares de cualquier victima de un accidente, un robo a mano armada o de cualquier hecho violento.

Pero ya esto es parte del pasado, de otra era.

De tiempos más humanos, más racionales.

Lo que pasa no es comparable ni con la época de las cavernas ni con cualquier otro momento de los vividos por los conglomerados humanos, no importa en que lugar del planeta.

 

Click to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Editorial

Por sus hechos los conoceréis

Published

on

La investigación de Participación Ciudadana conjuntamente con la Unión Europea revela una realidad sobre los partidos políticos dominicanos que todo el mundo conoce.

La partidocracia constituye una verdadera desgracia nacional y salir de ella depende de dos aspectos muy importantes, los cuales son el surgimiento de una forma diferente de hacer política en el país y que la gente se decida a producir ese cambio que tanto necesita la nación.

Este diario siempre ha sostenido que el sistema de partidos más que contribuir con la construcción de un país diferente, lo que hace es distribuir lo poco que queda en la nación.

Es tan grave el comportamiento de los partidos que obstaculizan todo aquello que representa alguna dosis de ética y de moral en la sociedad dominicana.

Es un festín no lo excluya a ninguno, porque todos, prácticamente sin excepción, recurren el mismo camino de depredar el patrimonio público.

No les importa el destino sano de la República Dominicana, sino acumular riquezas sobre la base de sustraer el dinero público que debiera ir a mejorar los sistemas educativo, de salud y procurar promover la preservación del medio ambiente y los recursos naturales, pero todo se queda en un discurso fundamentado en la mentira y en el engaño.

La República Dominicana tiene muchos hombres y mujeres con un profundo nivel de espiritualidad, que crean en la transitoriedad de la vida, que saben que todo lo material se queda sin importar los grandes depósitos en los bancos que se tengan.

El país demanda de hombres y mujeres que se afiancen n en valores y que amen al prójimo sobre la base de crear un espacio en el que prevalezca la hermandad, la solidaridad y la reciprocidad.

Parece algo quimérico, por los profundos niveles de enfermedad de la sociedad dominicana, donde todo se traduce en lo monetario, pero si realmente se asume el compromiso de levantar un proyecto político sustentado en las potencialidades de la nación y de una administración ética de ellas, las cosas pueden ser definitivamente diferentes.

Hagamos la prueba y verán.

Continue Reading

Editorial

Gaza, herida sangrante en la vida infantil.

Published

on

La muerte de niños en Gaza como resultado de los bombardeos de las fuerzas militares de Israel no resiste la más mínimas indiferencia.

Nadie, Absolutamente nadie, que haya nacido de una madre puede soportar el dolor que implica sólo contemplar el sufrimiento de los niños de Gaza.

Es impresionante como mueren ellos ante la mirada complacientes de algunos y de mucho dolor de otros.

Son escenas las que sufren los pequeños en Gaza que hasta hablar del tema crea un nudo en la garganta.

Los que matan de esa forma no se sabe cómo llegan a sus hogares y pueden ver las caritas tiernas de sus hijos pequeños, de esos que sólo saben dar amor y ternura.

Es un drama que rebasa lo humano para convertirse en salvaje, abominable, despreciable y además poco entendible.

No hay un número exacto de infantes que mueren como palomas en Gaza, sin que importe mucho para los indolentes y para los que  promueven ese genocidio.

Todo el que es padre de seguro no resiste semejante sufrimiento de niños de todas las edades, penosamente promovido por adultos.

Lo que pasa en Gaza es una verdadera tragedia en contra del mundo infantil, de niños que no saben del por qué son víctimas de crímenes de lesa humanidad.

Continue Reading

Editorial

La superficialidad en la interpretación de la sentencia del Tribunal Constitucional

Published

on

Desde el mismo momento de la emisión de la sentencia del Tribunal Constitucional han habido reacciones que buscaban quitarle autoridad al órgano extra poder porque se trata del surgimiento de una forma de romper con el monopolio o control de los partidos políticos en todo el sistema institucional del país.

La ofensiva ha sido tan osada  que hay legisladores que han caído en una serie de posiciones contrarias al estado de derecho que en estos tiempos arropa a todo el mundo.

A propósito de la sentencia TC/0788-24 se han escuchado los disparates más inconcebibles  para buscar justificar lo que no tiene asidero en un estado social democrático y de derecho.

Lo peor de todo es que los grandes diarios que tanto hablan de libertad de expresión y difusión del pensamiento son los primeros aliados de los que no tienen la razón, como si en realidad poco les importara lo que supuestamente siempre han defendido.

Esto así, porque las posiciones de fondo de los que defienden las candidaturas independientes resulta altamente difícil que sean publicadas por los palaidines de la libertad de prensa.

De cualquier modo, este lunes a partir de las diez de la mañana en el salón Hugo Tolentino Dipp de la cámara de diputados se produce un episodio muy importante para defender esta figura jurídica, que sin bien no es una panacea al sistema político desacreditado y corrompido del país, sirve para que la democracia sea más participativa y pluralista.

Nadie ignora que los partidos políticos son los dueños del sistema, no sólo legal, sino también electoral y ello le otorga la autoridad de provocar grandes sufrimientos a la gente a través de una gestión pública bañada de corrupción administrativa.

Hay una expresión que dice que los derechos no se mendigan, sino que se arrebatan y en esa virtud se impone acudir al congreso nacional a rechazar los criterios de los que creen que pueden robarse el patrimonio público y negar la oportunidad de producir cambios importantes en la democracia dominicana en momentos en que esta atraviesa por una profunda crisis de credibilidad.

El momento es oportuno para que se escuche la voz de un pueblo que ya no soporta más atropellos de los que tienen el control del Estado y cuyas políticas sólo están dirigidas a provocar mayor deterioro de la vida institucional de la nación.

Mientras tanto, las candidaturas independientes ya son una realidad que están avaladas por una sentencia que tiene el carácter vinculante y  de lo irrevocablemente juzgado.

De lo que se trata ahora es de establecer las regulaciones que son propias del régimen legal, pero estas nunca pueden vulnerar el derecho, valor y principio de igualdad, porque entonces el país se colocaría en una seudo constitución y un estado de derecho que sería una falsa.

Continue Reading

Edificio La República: Restauración No. 138, cuarta planta, Santiago, República Dominicana. Teléfono: 809-247-3606. Fax: 809-581-0030.
www.larepublicaonline.com  / Email: periodico@larepublicaonline.com
Copyright © 2021 Blue National Group